António Zambujo acaba de lanzar el noveno álbum de su carrera: «António Zambujo Voz e Violão», título que se inspira en el nombre de uno de los discos de su vida: «João Voz e Violão», el álbum de João Gilberto publicado en 1999.
Sencillo y hermoso el nuevo disco de António Zambujo crea magia de lo esencial. Música y voz desnudas que enamoran en las 13 canciones que componen el álbum.
En «Voz e Violão», hay temas originales compuestos por el propio artista como ‘Visita de estudo’ y ‘Sinais’, en los que cuenta respectivamente con poemas de Maria do Rosário Pedreira y João Monge, pero también canta temas de otros compositores como es habitual es sus discos. En esta ocasión vuelve a contar con los hermanos Luís Martins e Pedro da Silva Martins (Deolinda) que además de firmar la música del que fue primer single del álbum, ‘Lote B‘, también son autores de la música de ‘Bricolage’. La letra de ambos temas es del solicitadísimo Pedro da Silva Martins.
Otro de sus colaboradores habituales y gran amigo que vuelve a componer para él, es el imprescindible Miguel Araújo que le regala el tema ‘Pião de Corda’. Además , Zambujo canta por primera vez un tema de Agir, ‘O Sol de azar’ una colaboración que sorprende y que anuncia un cambio en la línea musical del popular artista. Pero sin duda la colaboración más especial del álbum es la de Diogo Zambujo, el hijo mayor del artista, autor de ‘Escutando o universo’. Diogo no sólo se estrena como compositor sino que además, canta el tema a dúo con su padre del que es evidente que ha heredado el talento y la bonita voz.
Otra parte del disco está compuesta por bellas y personalísimas versiones. Zambujo se atreve a cantar por primera vez en inglés en su particular mirada a ‘Mona Lisa’, en español nos regala una maravillosa versión del clásico ‘Tú me acostumbraste’ y lleva a su terreno y estilo el ‘Como 2 e 2’ de Caetano Veloso.
Este disco también es un retorno a sus orígenes musicales: por un lado el cante alentejano del que interpreta la canción popular ‘Pelo toque da viola’, una moda tradicional que transforma en una bella balada y por otro lado el fado, con ‘Rosinha dos limões’ y ‘Adeus Parceiros das Farras (Partir É Morrer um Pouco)’.
Una delicia de disco de principio a fin. Fue grabado en la calma del Alentejo, en Porto Corvo, donde el músico ha pasado el último año y cada canción transmite esa paz y esa calma y es una auténtica gozada escucharlo. Zambujo en su versión más pura.