Como todos los años, el Ciclo «Fronteras» organizado por el CNDM (Centro Nacional de Difusión Musical) nos trajo un espectáculo maravilloso: la presentación en directo del disco «Aqui está-se sossegado» del fadista Camané y el pianista y compositor, Mário Laginha. Una velada de fado en estado puro que disfrutamos muchísimo gracias a la complicidad evidente entre ambos.
Tras salir al escenario, Camané agradeció al público su asistencia y ya el primer tema ‘Não venhas tarde’, fue recibido con fuertes aplausos y un ¡bravo! espontáneo entre los asistentes. Poco a poco fueron desgranando los temas de su dico conjunto, «Aqui está-se sossegado» con temas como ‘Quadras’, con poema de Pessoa, autor que nunca falta en los discos de Camané, ‘Dança de Volta’, la maravillosa ‘Com que voz’, que nadie canta como él, ‘Ela Tinha uma amiga’, ‘A Guerra das Rosas’, ‘Rua das Sardinheiras’, ‘Se Amanhã fosse Domingo’ y un tema que no podía faltar y que también formó parte del álbum «Camané Canta Marceneiro»: ‘A Casa da Mariquinhas’.
También disfrutamos de preciosos solos al piano del maestro Laginha y temas del repertorio en solitario del fadista como ‘Te juro’, ‘Mote’ o ‘Sei de um rio’ así como temas del repertorio de Amália Rodrigues como ‘Espelho Quebrado’ y un pequeño homenaje a Carlos do Carmo com ‘A Minha Rua’, pero sin duda el momento más especial sucedió cuando cantó el imprescindible fado ‘Abandono’, con el que Camané nos regaló una interpretación de esas que te pone la carne de gallina y te deja el alma en un puño. El tema fue aplaudido durante varios minutos por el público ante un visiblemente emocionado Camané.
Tuvimos además la suerte de poder disfrutar en exclusiva y por primera vez, ‘Falsa Partida’, tema del nuevo disco de Camané, «Horas Vazias» que cuenta con música de Mário Laginha.
La Sala de cámara del Auditorio Nacional de Música de Madrid estuvo a punto de colgar el cartel de aforo completo, tan solo quedó alguna butaca vacía, y fue testigo de una noche realmente muy bonita, de esas que cualquier amante de la música disfruta de principio a fin.
Siempre es un placer ver a estos dos artistas juntos sobre un escenario y en este concierto estuvieron especialmente en estado de gracia y la noche fue todo un regalo para los tuvimos la suerte de asistir.
Camané es un hombre de pocas palabras sobre el escenario, pero la verdad es que no las necesita. Su manera de estar, su elegancia innata al cantar y ese toque de leve timidez, hace que no sea necesario nada más que su voz y su presencia para llenar el escenario y más aún en este caso acompañado por el magnífico y virtuoso pianista Mário Laginha, dos grandes artistas a los que no nos cansamos de ver en directo.
