Ana Laíns tiene una de las voces más bonitas y especiales de la música portuguesa. Su último trabajo, «Portucalis», forma parte de nuestra lista de los mejores discos lanzados en 2017. Enamorada como nosotros de su país, su pasión por él respira en cada nota de su disco. Auténtica, honesta e independiente, charlamos con ella sobre este disco tan bonito y tan portugués y sobre esa «portugalidad» que la acompaña siempre y que nutre su música.
La música continuará siendo mi forma de expresar todo aquello en lo que creo.
N. S.F. Dices que «Portucalis» es tu país de los sueños, ¿cuáles son esos sueños, por qué escogiste ese nombre para el álbum ?
A. L. ¡Portucalis es una palabra que yo creo que inventé cuando tenía 19 años! Tuve una banda de música tradicional portuguesa que se llamaba así. Por algún motivo este nombre siempre me acompañó y siempre lo relacioné con el amor que siento por la condición de haber nacido portuguesa. Yo soy feliz por ser portuguesa y estoy muy agradecida al universo por haberme dejado nacer en este lugar repleto de historia cultura, tradiciones, magia y ¡muchas capacidades!
Además siento que Fernando Pessoa sigue siendo actual en su escritura: <<Señor falta cumplirse Portugal>>
Sueño con un país más seguro de sí mismo, que respeta sus usos y costumbres, orgulloso de su historia y consciente. Yo vivo en la dualidad que me provoca esta pasión. Portucalis es el reflejo y el resumen de esa cualidad que me mata y renueva todos los días.
N. S. F. Hablando de sueños, profesionalmente ¿qué sueños quedan todavía por cumplir?
Yo sueño mucho. Sueño todos los días. Y he trabajado mucho para cumplir todos mis sueños pero muchos todavía no se cumplieron y ¡es eso lo que me alimenta y me entristece! Este disco es uno de mis sueños realizados más importantes porque surge después de 7 años de lucha interior. Es un disco en el que fui muy fiel a mí misma. Sólo a mí.
La música y mi carrera de 18 años me dieron casi todo lo bueno que tengo en la vida: me dieron a mi marido, gran parte de los amigos que tengo y la mayor riqueza que un ser humano puede tener, viajar y conocer otras culturas y consecuentemente volverse más rico y más comprensivo con el mundo y con las personas. Ya compartí escenario con algunas de mis mayores referencias en la música, pisé escenarios que no pensaba que algún día pasaría y conquisté el respeto de gran parte de mis colegas y del mercado de la música en Portugal. Ya conseguí mucho y de la forma que tiene más sentido para mí, siendo siempre honesta y seria en la forma de existir en este mundo complicado y donde la superficialidad y los intereses personales son más importantes que la música y su propósito.
Pero todavía me falta entrar en un escenario grande y tener millones de personas cantando una canción mía. Me gustaría que eso pasase porque fuera muy buena no porque se gastaron millones de euros en un plan de marketing gigante.
Y faltan todos los discos que todavía quiero grabar. Las ideas son tantas… Creo que mientras yo crea en un mundo mejor y más justo, ¡la música continuará siendo mi forma de expresar todo aquello en lo que creo!
N. S. F. Todo tu trabajo está dedicado a la Portugalidad, ¿pero qué es la Portugalidad para ti?
A. L. Muchas gracias por hacerme esta pregunta, ¡nadie me la había hecho todavía! La Portugalidad es todo lo que transporta la identidad de Portugal en cuanto pueblo, en cuanto nación, en cuanto territorio.
Es la entidad resultante de las herencias que nos fueron siendo dejadas a lo largo de miles de años de historia en los que fuimos invadidos por otros pueblos y fuimos colonizadores. Llevamos costumbres y también las trajimos. Los pueblos que aquí habitaron dejaron una herencia muy vasta que todavía hoy se refleja en todo lo que somos.
Desde nuestra lengua que tiene más de 800 años pasando por lo que es nuestra música, nuestra gastronomía, nuestra arquitectura etcétera.
Adufes, Pauliteiros, Concertinas, los melismas de nuestro canto, la guitarra portuguesa, la campaniça, las especias, lo galaico portugués, lo Mirandés… en fin… son elementos que forman parte de nuestra identidad cultural, ¡la que nosotros llamamos portugalidad!
Y tener respeto por esa portugalidad es esencial para que se siga construyendo y haciendo historia de forma lógica. ¡Un país tiene que tener memoria para que pueda tener un futuro! Este disco transporta todas las influencias y ¡es mi contribución para que la memoria no se borre! Y es concomitantemente, un disco con los ojos puestos en el futuro y en la esperanza de mostrar al mundo que ¡Portugal es mucho más que Fado, Fátima y vino de Oporto!
Si todos aceptamos a nuestra patria y la defendemos, estaremos contribuyendo a la multiculturalidad, a la diversidad y a nuestro enriquecimiento.
N. S. F. ¿Cuáles crees que son las mayores diferencias en este trabajo en relación a los anteriores? ¿Cómo ha cambiado Ana Laíns desde el primer disco? ¿Qué es lo que permanece?
A. L. La madurez, las certezas ( que nunca son definitivas… pero que se van cimentando en el transcurrir de la vida).
El respeto por mí misma y por mí y ¡por mi derecho de existir sin tener como fin agradar a los otros!
Cualquiera de los otros dos discos anteriores fueron tan verdaderos respecto a que conseguí entender que sería mi verdad. Ninguno de ellos fue construido teniendo como propósito el «mercantilismo» y sus exigencias. En los dos sólo canté lo que quise cantar, así y todo, fueron trabajos que estuvieron contextualizados en una fase de búsqueda personal y profesional que me confería alguna inseguridad e incoherencia.
Especialmente después de “Quatro Caminhos” en 2010, me quedé con el control absoluto de mi carrera pues decidí hacer mi propio management y booking y fueron 7 años de mucho aprendizaje y ese aprendizaje asociado a mis convicciones personales y profesionales culminaron en el álbum. Portucalis es el resultado de unas ganas inmensas de cumplir quien soy. Voluntad que no conseguí y no quise callar, ganas de que todos los seres humanos deberían tener derecho de poder cumplir.
N. S. F. ¿Cómo fue el proceso creativo del álbum, fue creado en torno al concepto de Portugalidad? ¿Cómo llegaste a él?
A. L. Este álbum ha sido cocinado principalmente durante los últimos 7 años . En 2009 surgió en mi vida un espacio en Sintra que se llama“Taverna dos Trovadores”, que es un santuario de la portugalidad. Allí conocí a muchas de las personas que más me inspiraron en los últimos tiempos y me ayudaron a concluir que yo no soy fadista y sí una cantante de cariz portugués de una forma global. ¡Eso fue preponderante!
Y en este espacio nosotros tocamos y cantamos mucho el cancionero tradicional de varias regiones del país y esa experiencia acabó por funcionar en mi música como una especie de laboratorio donde yo reafirmé mi sonido como cantante. Me aproximé de nuevo a mis raíces y a la literatura portuguesa y principalmente salí de mi zona de confort.
muchos de los temas que grabé en Portugal y son temas que fueron construidos allí y que son parte de mis conciertos hace algún tiempo, aunque los temas originales fueron siendo construidos con mucha calma. Y cuando llegó la altura de materializar este disco escogí el productor que mejor me conoce y uno de los mejores músicos que yo conozco Paulo Loureiro mi marido, pero principalmente el pianista arreglista el músico que más sabe sobre mí. Escogí los músicos que hacen parte de mi recorrido y fuimos a ensayar, a crear arreglos nuevos, discutir ideas, experimentar, escribir y borrar, escribir y borra, escribir y borrar hasta llegar al sonido que sentimos que era el nuestro en definitiva.
Fueron preponderantes todos los músicos y sus ideas: José Salgueiro a la batería y a las percusiones, Carlos Lopes, al acordeón Hugo Ganhão al bajo y Bernardo Couto a la guitarra portuguesa. Y no no puedo omitir la importancia de Fernando Nunes coproductor y técnico de este disco.
La portugalidad está siempre presente, no de forma pensada pero de forma sentida, porque no es un objeto que utilizamos en nuestra música y si sangre que nos corre por las venas
N. S. F. En «Portucalis» colaboran grandes nombres de la música portuguesa como Mafalda Arnauth o Luis Represas. ¿Cómo y por qué cogiste a cada uno de tus colaboradores del disco?
A. L. Yo nunca tuve invitados en un disco. Como este disco fue una concretización personal muy grande y la celebración de mi recorrido de, mis elecciones y de mis 18 años de música, quise tener amigos que fueron importantes en ese camino. ¡Cuando celebramos necesitamos de amigos! A nadie a nadie le gusta celebrar solo ¿no? Mafalda es una de mis mayores referencias humanas y profesionales, una gran intérprete con quién aprendí mucho y es una gran amiga que conoce todas mis inquietudes y cuestiones personales.
Luís Represas era un sueño antiguo. Uno de los nombres más importantes de la actualidad a través de su trabajo individual pero también a través de su trabajo con Trovante. Con su canto aprendí a cantar sin vanidad dando solo valor a la melodía y a las palabras.
Filipe Raposo es uno de los mayores compositores y pianistas de la nueva generación y fue mi tributo a los músicos y al respeto que todos les debemos.
Iván Lins era otro sueño antiguo. Tal vez mi referencia más grande fuera de Portugal me acuerdo de tener 20 años de cantar como cantante residente en el Casino de Figueira da Foz y cantar temas de él y soñar que un día cantaría junto a él. En 2015 realicé este sueño y en 2017 me ofreció un tema para el disco nuevo.
Son pequeños nadas a los ojos de los otros, para mí son premios que valen toda mi carrera. ¡Estoy muy agradecida!
N. S. F. En 2009 colaboraste con Boy George en el tema ‘Amazing Grace’ ¿Cómo surgió esta colaboración?
A. L. Fue una situación muy graciosa en realidad. Él estaba buscando una cantante étnica y me encontró a través de MySpace. Contactó con mi discográfica y me invitó. Yo no me lo podía creer ¡pensaba que era una broma! ¿Por qué rayos iba a Boy George a querer grabar conmigo, una ilustre desconocida? Pero después entendí que era real. Fue mi gran llamada de atención para la humanidad, para la inmortalidad de los dioses. (Risas)
Fue muy sencillo de concretizar. Hablamos una vez por teléfono, el explicó de lo que se trataba me envió el tema y yo escribí la letra y la melodía que canté. Grabé y envié. Así de sencillo. Nunca nos conocimos personalmente pero espero que eso pase algún día de estos. Estoy muy agradecida por la invitación y por haber despertado su atención, es una medallita más importante para mí baúl de las concretizaciones.
N. S. F. ¿Cuáles son las mayores influencias musicales dentro y fuera de Portugal? ¿A quién admira Ana Laíns? ¿Hay algún español entre ellos?
A. L. ¡Me gusta la música! ¡Oigo mucha música y oigo música de todas partes! Me gusta especialmente la música que caracteriza a un pueblo. O si prefieres la llamada world music hoy en día. ¡Me gusta de todo! Me gusta toda la gente que hace música con un propósito humano. La lista es muy amplia Né Ladeiras, Fausto, Cristina Branco, Gaiteiros de Lisboa…pero también Adufeiras de Idanha-a-Nova y de Monsanto y de muchos otros grupos étnicos y desconocidos pero que representan toda la portugalidad de una forma muy genuina y comprometida. Idan Raichel de Israel, Sting, Peter Gabriel, Anoushka Shankar, Rachel Ferrer, Loreena McKennitt… La música en España también está en perfecto estado de salud y me trajo siempre grandes influencias en Galicia: Uxia, Luar Na Lubre o Barahunda. Pero después de forma más global, Concha Buika y Luz Casal son mujeres maravillosas y con un talento único.
N. S. F. ¿Piensas que Portucalis es tu mejor disco, a lo mejor el que más te define?
A. L. Seguramente es el mejor álbum porque es el que tiene más sentido musicalmente soy fan de mi primer disco «Sentidos» y continúo considerando que en 2016 fue una revolución. «Quatro Caminhos» fue un paso al frente en el sentido de llegar a la sonoridad que yo sentía como mía. Ves claramente esa voluntad en temas como ‘Ricochete’ o ‘Afinal’ o el propio ‘Quatro caminhos’ pero en Portucalis todo fluye con naturalidad, la música sucedió con naturalidad, mi interpretación sucedió con naturalidad y no hay un único tema que no tenga sentido. Todos tienen una historia y un motivo concreto para estar ahí y es el más consistente de los tres sin duda.
N. S. F. En Portucalis, además de fado hay otros géneros e influencias, ¿puedes contarnos cómo ves la sonoridad de tu álbum, tiene el fado más peso en tu música que otros géneros?
A. L. Yo escribí mi propia nota de prensa y empiezo diciendo: << Portucalis es un disco no sujeto connotaciones o a rótulos>> Creo que es una frase que denuncia la forma como veo mi música, para mí es muy reductor que se relacione la música portuguesa solo con fado como la música de España solo con el flamenco. Si yo mandas en mercado de Portugal existía una estantería en la Fnac llamada MPP (Música popular portuguesa) donde cabrían todos los discos de fado pero también de todos otros géneros y ritmos de la música portuguesa. ¿Cómo catalogamos a Zeca Afonso, a Dulce Pontes, a Fausto…? para mí es música popular portuguesa. Hasta incluso las fadistas que hoy son casos de éxito en Portugal, tiene muy poco de Fado están cada vez más genéricas en su forma de hacer música. ¡El fado es mucho más que una forma de música! Es una forma de estar y para comprender por qué digo esto, es fundamental pasar algún tiempo en Lisboa y visitar casas como Mascote da Atalaia, la Tasca do Chico, o ¡la Mesa de Frades! El fado es uno de mis lenguajes y tiene la misma importancia de todos los otros que me definen.
N. S. F. Ya estuviste en España, ¿hay planes para volver en 2018?
A. L. Sí, espero que sí. Tengo contactos a desarrollarse en ese sentido. Por ejemplo en Madrid donde nunca canté y me gustaría mucho cantar. Me gusta mucho cantar en España porque me siento próxima de mi identidad y de la historia de mi país. Son dos países con mucha conexión independientemente de habernos separado territorial y políticamente seremos siempre pueblos hermanos.
N. S. F. ¿Qué pide Ana Laíns a 2018?
A. L. Pido que me dejen cantar, sólo que me dejen cantar.